Los discursos de Rajoy y el Príncipe en la estación del AVE se vieron acompañados por explosione de petardos y abucheos de los concentrados. Al finalizar el acto, decenas de personas intentaron bloquear las salidas del edificio, la policía cargó y volaron algunas piedras por el aire.
Una batalla campal con carga policial se ha producido en la puerta de la estación de Renfe instantes después de finalizar el acto de inauguración de la llegada del AVE a Alicante. Cientos de personas colapsaron las avenidas adyacentes a la terminal alicantina. La tensión fue subiendo de grados a la finalización del acto que contó con la presencia del Príncipe Felipe y el presidente del gobierno Mariano Rajoy.
Uno de los agentes que puso el ventilador en forma de porra fue sujetado por varios manifestantes para ser golpeado con la misma brutalidad que había empleado segundos antes con todo lo que se encontraba por su camino. Paralelamente, hubo lluvia de piedras por lo que peligró gravemente la integridad física de todo el que se encontraba en ese foco de conflicto. Fue el momento de mayor tensión en una mañana llena de protestas y concentraciones masivas de diferentes colectivos.
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La verdad es que no sé como no se les cae la cara de vergüenza, lo suyo es dirigirse a la población y periodistas a través del plasma, así no tendrán problemas. ¿Pero como se puede ser tan desvergonzado? querrán que con todos nuestros derechos arrebatados aún estemos calladitos. ¿Y la policía? no son humanos, son mercenarios.
ResponderEliminarUna vez más me quito el sombrero Cesar ante el arte que tienes para manipular. La policía daba porrazos y pegaba y luego hubo "lluvia de piedras" y "piedras que caían". Extraño fenómeno meteorológico que se produce en las manifestaciones que tu apoyas, aunque luego no te atrevas a defender abiertamente estos métodos, solo subrepticiamente.
ResponderEliminarEstos "romanos" no tienen vergüenza están a las ordenes de un gobierno facista que por unas migajas apalean al pueblo
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