Una asociación de vecinos de Palma ha denunciado que el Ayuntamiento les entregó este viernes restos de pan mohoso, podrido y mordisqueado para repartir entre familias necesitadas, un servicio que realiza desde hace tiempo en un programa social del municipio.
La asociación es una de las entidades que participa en el programa Aliments en Xarxa, promovida por el Ayuntamiento, del PP, para ayudar a colectivos en situación de pobreza. Como cada viernes, dos voluntarios fueron al Ayuntamiento a buscar la comida y a la vuelta se encontraron con panes putrefactos.
Según uno de los voluntarios, media docena de panes estaba en buen estado, pero la mayoría estaba "enmohecido y cortado como si se tratara de sopas mallorquinas y de sobras de una mesa. Ni los perros se hubiesen comido ese pan".
El programa Aliments en Xarxa se creó en 2009 y en los últimos años se ha visto desbordado por el exceso de peticiones. Los víveres son donados por supermercados, vecinos y por la Unión Europea. Al consistorio le corresponde revisar la comida recibida y repartirla entre las diferentes asociaciones encargadas del reparto final entre familias necesitadas.
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