Una profesora de Literatura de un colegio público de San Luis, en Argentina, fue sancionada con una suspensión de 90 días sin sueldo por indicar a sus alumnos de secundaria la lectura del libro 'Hay una chica en mi sopa', que narra la historia de una adolescente que se siente atraída por su profesora de alemán.
El Ministerio de Educación la sancionó a mediados del pasado mes de mayo, después de que un grupo de padres y madres calificaran el libro como "pornográfico" y consideraran que su lectura era un "atropello" a la educación de sus hijos. Según la dirección del centro, varios alumnos y alumnas dijeron que les daba vergüenza leerlo en voz alta.
Romina García Hermelo, de 30 años y tres cursos como docente en el colegio Nicolás Antonio de San Luis, ha afirmado que buscó cumplir con el tratamiento transversal que plantea la Ley de Educación Sexual Integral. Organizaciones sociales y sindicales han organizado diversos actos de apoyo a la profesora.
García Hermelo cree que el libro "es apropiado para esa edad. El año pasado lo usé y me fue muy bien, surgieron dinámicas interesantes. Y en caso de que no lo fuera para algunos padres, madres o incluso para el equipo directivo, los modos fueron realmente injustos para mí".
Los sindicatos denuncian la orientación profundamente religiosa de la educación en este centro, en cuya sala de profesores hay colgada una fotografía del nuevo papa argentino, Francisco.
Agencias
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